Duelo desautorizado o no reconocido

El duelo no reconocido se refiere a aquel tipo de duelo que, por diversas razones, no es socialmente validado o apoyado, lo que puede complicar significativamente el proceso de duelo. 

El impacto de este tipo de duelo puede ser profundo, ya que la falta de reconocimiento y apoyo social puede exacerbar el sufrimiento del doliente.

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¿Qué es el duelo desautorizado y por qué se da?

Cuando hablamos de ‘pérdida’, a menudo pensamos en el fallecimiento de un ser querido.

No obstante, el proceso de duelo también puede presentarse en distintos contextos, tales como el final de una relación sentimental, la despedida de un trabajo o el afrontamiento de una enfermedad difícil.

En esta página, abordaremos el duelo por fallecimiento que resulta desautorizado.

El duelo desautorizado se refiere al dolor que no puede ser abiertamente reconocido, públicamente llorado, socialmente apoyado, o que es malentendido o trivializado.

Esto puede ocurrir cuando la relación con la persona o entidad perdida no es ampliamente reconocida, la naturaleza de la pérdida no se considera significativa desde una perspectiva social, o cuando el doliente mismo no es visto como alguien capaz de experimentar duelo de manera «legítima» debido a factores como la edad, la capacidad mental, o la relación con el difunto.

Ejemplos de pérdidas que se asumen menos significativas en base al vínculo:

  • Pérdida de familia no-inmediata: Duelo por un ex-cónyuge/ex-pareja, compañero de trabajo, amistades...)
  • Pérdida de una relación no reconocida por otros: Relaciones afectivas no formalizadas o relaciones extramatrimoniales).
  • Duelo perinatal.

Ejemplos de duelos desautorizados en base a características de doliente:

  • En base a la edad: se le considera demasiado mayor o demasiado joven.
  • En base a facultades mentales: El duelo es desautorizado por considerarle con menores capacidades mentales.

Otros tipos de duelos desautorizados por fallecimiento:

  • Pérdida de mascotas.

Pérdidas estigmatizadas:

  • Suicidio
  • Homicidio
  • Enfermedades como el SIDA

¿Cómo se vive el duelo desautorizado?

Enfrentar una pérdida de por sí implica atravesar una amplia gama de emociones, y resulta completamente natural experimentar que no podemos con la situación.

El duelo abarca aspectos tanto emocionales como físicos. 

En el contexto del duelo desautorizado, este proceso puede hacernos sentir aún más aislados, ya que la pérdida no es ampliamente reconocida o validada por el entorno social.

En estos casos, encontrar un espacio seguro donde puedas expresar libremente tus emociones, sin miedo al juicio y con total autenticidad, se convierte en un aspecto crucial para tu sanación.

La forma en que cada persona vive su duelo es única, y no hay un tiempo definido ni una «manera correcta» de atravesarlo. 

El impacto del duelo desautorizado

La importancia de identificar el duelo desautorizado radica en comprender cómo las respuestas sociales a la pérdida afectan los procesos de duelo de un individuo.

El impacto de este tipo de duelo puede ser profundo, ya que la falta de reconocimiento y apoyo social puede exacerbar el sufrimiento del doliente, llevando a complicaciones como depresión, ansiedad o estrés postraumático o a la dificultad de encontrar.

Cómo podemos ayudar a alguien que lo está experimentando

Para ayudar adecuadamente a alguien que está experimentando un duelo desautorizado, es importante:

  • Reconocer la pérdida: Validar y comprender que la pérdida es significativa, independientemente de que no se ajuste a las circunstancias o relaciones típicamente reconocidas por la sociedad.
  • Aceptar las respuestas emocionales: Apoyar al doliente aceptando sus reacciones emocionales, sin emitir juicios sobre cómo debería sentirse o expresarse.
  • Fomentar el afrontamiento adaptativo: Animar al individuo a adoptar estrategias de autocuidado saludables y a desarrollar mecanismos de afrontamiento que faciliten la adaptación a su nueva realidad.
  • Promover prácticas culturales y/o religiosas: Incentivar la participación en rituales que puedan ofrecer consuelo y un sentido de comunidad y apoyo, respetando las tradiciones y creencias del doliente.
  • Cada uno de estos puntos ayuda a proporcionar un marco de apoyo que reconoce y valida el duelo desautorizado, promoviendo la integración de la pérdida en la vida del individuo.

Es importante que como sociedad aprendamos a validar y respetar todas las formas de duelo, reconociendo que cada experiencia de pérdida es significativa y merece comprensión y apoyo. 

Para las personas que atraviesan un duelo no reconocido, la terapia puede ofrecer un espacio vital para explorar y procesar sus emociones en un ambiente de aceptación y comprensión.